Os anunciamos que todos los viernes tendremos en la capilla de la Parroquia una hora de adoración ante el Santísimo.
-¿Por qué es
importante la adoración?:
Porque el
Señor está llamando a la puerta de nuestro corazón:
"Mira
que estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y me abre la puerta,
entraré en su casa y cenaré con él y él conmigo" Ap 3, 20
Es necesario
que tomemos conciencia de que este es el tiempo para vivir la adoración según
la Voluntad del Padre:
"Pero
llega la hora (ya estamos en ella) en que los adoradores verdaderos adorarán al
Padre en espíritu y en verdad, porque así quiere el Padre que sean los que le
adoren. Dios es espíritu, y los que adoran, deben adorar en espíritu y
verdad.» Jn 4, 23 - 24
El hombre
está hecho para adorar, tiene necesidad de adorar. O adora al único Dios
verdadero, y de esa manera camina hacia la libertad, o adora a los ídolos, la
obra de sus manos, y por ese camino se hace cada vez más esclavo.
"Adorarás
al Señor tu Dios y sólo a él darás culto". Lc 4, 8
-¿Es difícil
adorar?
El Espíritu
Santo nos introduce en el mundo espiritual cuando nos postramos con humildad y
reverencia ante el Santísimo, por eso necesitamos de su guía y dirección,
" El hombre naturalmente no capta las cosas del Espíritu de
Dios". 1 Co 2, 14.
-Adorar es
someterse:
Es reconocer
que Dios es Dios, rindiendo nuestra mente y nuestro corazón ante Aquel que es
omnipotente, omnisciente, fuente de Vida y Amor infinito.
Es entonces
cuando el "misterio" se transforma en "encuentro de
Amor", con la ayuda del Espíritu Santo, "que ha derramado el
Amor del Padre en nuestros corazones". cf Rm 5,5
Por su acción
en nuestro corazón, en nuestra mente y en toda nuestra vida, el Espíritu Santo
nos transforma a la imagen de Cristo, nos restaura y nos hace libres:
2ª Cor, 3, 17
- 18: "Porque el Señor es el
Espíritu, y donde está el Espíritu del Señor, allí está la libertad.
Mas todos
nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria
del Señor, nos vamos transformando en esa misma imagen cada vez más gloriosos:
así es como actúa el Señor, que es Espíritu".
La invocación al Espíritu Santo y la
alabanza a través de la oración y el canto, nos ayudan a entrar en la adoración
donde tenemos el encuentro personal con Cristo.
Desde esa posición también podemos
adorar por aquellos que no lo hacen, e interceder con Cristo ante el Padre por
tantas situaciones que necesitan de su intervención.
"El es el mismo, ayer hoy y
siempre" cf Hb 13, 8, y "tiene todo
poder en el cielo y en la tierra". cf Mt 28, 18
Podemos confiar en la Palabra del Señor
cuando nos dice: "Pedid y se os dará; buscad y hallaréis; llamad y
se os abrirá. Porque todo el que pide recibe; el que busca, halla; y al llama,
se le abrirá" Mt 7, 7 - 8:
Jesucristo presente en la Eucaristía es
el "Enmanuel", (Dios con nosotros), que transforma nuestras vidas
cuando le adoramos con corazones humildes y sinceros.
El Señor nos llama,,... ¡¡ te
llama a ti,..!!, todos los viernes a las 22,00h en la capilla.
Os esperamos,..!!
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