Nuestros jóvenes responden si el tema interesa, y desde luego, el hablarles de que el mundo no es de color de rosa lo tienen claro, pero sí además les contamos que se tienen que implicar en el día a día para que éste mundo funcione, ponen más atención y despierta su curiosidad, sintiéndose que ponen un granito de arena para solucionar la vida y el entorno que les ha tocado.
Entre otras cosas eso es lo que estuvieron haciendo en el encuentro que tuvieron el dia 9 de marzo. En esta ocasión tuvimos una persona que está involucrada en la pastoral penitenciaria y en las misiones de países necesitados.
Este grupo está abierto a todos aquellos jóvenes que quieran crecer en la fe y en el amor a los pobres.
Si deseas participar ponte en contacto con la parroquia y nosotros te convocamos.
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